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(Artículo publicado en el boletín nº 57 de la escuela Huber, julio/septiembre 2007, con motivo de la celebración de los 70 años de su creación)
La fuerza del símbolo
Un poco de historia
Pablo Picasso nació en Málaga el 25 de octubre de 1881, hijo de María Picasso López y del profesor de arte José Ruiz Blasco. Hasta 1898 Pablo Ruiz Picasso siempre utilizó los apellidos paterno y materno para firmar sus obras, pero alrededor de 1901 abandonó el primero para utilizar desde entonces sólo el apellido de la madre. El genio de Pablo Picasso se pone ya de manifiesto desde fechas muy tempranas: a la edad de 10 años Picasso hizo sus primeras pinturas y a los 15 aprobó con brillantez los exámenes de ingreso en la Escuela de Bellas Artes de Barcelona, con su gran lienzo Ciencia y Caridad (1897, Museo Pablo Picasso, Barcelona), que representa, dentro aún de la corriente academicista, a un médico, una monja y un niño junto a la cama de una mujer enferma; ganó una medalla de oro.
No vamos a entrar en detalle en las etapas evolutivas, como pintor, de Picasso –período azul, período rosa, protocubismo y cubismo analista-sintético- porque ya están ampliamente referenciada por diversos autores, sino que nos centraremos en el Guernica, un cuadro creado como cartel publicitario para poner de manifiesto la injusticia y la barbarie del bombardeo de esta población vasca el 26 de abril de 1937 a las cinco menos veinte de la tarde.
Pablo Picasso: Málaga 25/10/1881, 23:15.
Exposición Guernica: Paris, 12/07/1937
Guernica
Ninguna obra de arte surge aislada, al margen del tiempo y el momento que la vio crecer, ni del estado interno del creador, y éste es el objetivo de este artículo: poner de manifiesto el puente simbólico entre el momento personal de Picasso y su expresión externa del cuadro que se ha convertido en uno de los símbolo de la cultura de la Paz.
En el año 1937, el PE (Punto de la Edad) natal de Picasso, transitando por el signo interceptado de Tauro, está llegando a la conjunción con Saturno, el primero de los cuatro planetas situados en el mismo. Saturno es el planeta más elevado de la personalidad y uno de los planetas de la figura de proyección con la Luna/Nodo en el ápice. Dentro del mismo signo, Neptuno y la conjunción de Júpiter con Plutón acompañan a Saturno. Tauro, opuesto a Escorpio donde se sitúa el Sol y Mercurio natal de Picasso, activan el eje de la individuación, de la libertad personal, de la expresión de la propia madurez a través de los objetivos y metas conseguidos.
Este cuadro fue creado para la colectividad (Sol en el FC, las raíces de la casa IV), para que lo contemplase un gran número de personas, de ahí su tamaño y la reducción a la gama del blanco al negro. Es un cuadro que busca producir un efecto sobre muchas personas, personas de todo tipo.
El signo de Escorpio está relacionado con la muerte y la destrucción. En el Guernica, sobre el asfalto de una calle, la luz de una farola nos enseña una escena terrible: de derecha a izquierda una mujer levanta los brazos clamando al cielo delante de una casa en llamas; otra mujer desesperada sale de la casa con un quinqué en la mano, otra huye arrastrándose y mirando obsesivamente al cielo de donde ha venido la destrucción. En el centro, el caballo (la península ibérica siempre se ha relacionado con Sagitario desde el tiempo de Manilius) con el vientre atravesado por una lanza como símbolo de la víctima inocente pero que se rebela y grita desesperadamente. En el suelo un guerrero muerto, aún con los ojos abiertos y la mano crispada de indignación y del otro brazo, seccionado, aguanta una espada rota de la que nace una flor. A la izquierda, el toro como símbolo de fuerza bruta está por encima de la mujer que llora con un niño muerto en sus brazos. Todos gritan contra la barbarie, personas y animales.
Josep Lluís Sert recordó de esta forma la reacción del público, en el año 1937: «La gente desfilaba ante la obra en silencio, como si se diesen cuenta de que además de su valor pictórico era una premonición de lo que después realizó la guerra mundial. Un grito de protesta contra la barbarie de toda guerra y más de las de nuestros días. Un grito, entonces, de un pueblo que lucha por su libertad, por su dignidad y por sus derechos».
Meses antes, en septiembre de 1936, el Gobierno de la República Española comunicaba a Picasso su nombramiento como director del Museo Nacional del Prado. En enero de 1937 dicho gobierno le encarga al pintor un cuadro-mural que decore el Pabellón Español durante la Exposición Internacional de Artes y Técnicas de 1937 en París, y éste acepta la encomienda.
El día 1 de mayo de 1937 Picasso contempla la fotografía en blanco y negro titulada "Visiones de Guernica en llamas", publicada en el periódico Ce soir, en la que se observa la ciudad vasca destruida. Aquella fue su inspiración; coge papel y lápiz y comienza a realizar decenas de bocetos del cuadro.
El foco de conciencia, la progresión de la edad, de Picasso está en Tauro, activando la figura de proyección de su carta Saturno/Luna/Nodo/Marte, el tránsito de Urano corrobora el impacto de las circunstancias externas. No es de extrañar que lo femenino como principio de conservación de la vida, está expresado en cuatro símbolos distintos en este cuadro: tres simbolizan agresiones a este principio-el niño muerto, el hogar en llamas y la locura- pero no todo está perdido, también está presente el símbolo de la luz, lo femenino que libera y guía entre el caos y la destrucción (la mujer con el quinqué en la mano). Solo un hombre, muerto en el suelo (Marte forma parte de la figura de proyección), el guerrero con la espada rota de la que surge una flor (la transformación de Escorpio). El caballo se puede interpretar como el símbolo de la libertad herida de muerte y el toro -a Picasso le fascinaban los espectáculos taurinos- se puede ver como la fuerza bruta de la guerra que pisotea lo más sagrado (encima de la mujer con el niño muerto en brazos).
Cada uno lo puede interpretar según su percepción, como toda composición simbólica, el mismo Picasso dijo una vez, "Es necesario que los espectadores vean en el caballo, en el toro, símbolos que interpreten como ellos quieren [...]. Para mí, es todo, que el público vea lo que quiere ver".
La mitología picassiana en el Guernica denuncia la brutalidad sobre la población civil, mujeres y niños, de los horrores de la guerra. La Luna estaba conjunta a Neptuno, en el signo de Virgo, el día en que por primera vez el cuadro quedó expuesto al público (encima del Urano natal de Picasso). El Sol, en Cáncer (las raíces del lugar de origen) acompañado de Mercurio y Plutón transitaban sobre su Marte natal (la denuncia de la masacre). La Luna/Nodo en el ápice de esta figura, expresando el arquetipo de Sagitario a través del creativo sector V: una imagen vale más que miles de palabras. Ésta es la fuerza del símbolo originada en la base de la figura de proyección y manifestada a través del sextil de Saturno y Marte. La reacción al Urano colectivo externo que no vacila en matar inocentes para imponer su ideología (Urano a nivel inconsciente en su vibración más densa). La expresión del mundo interno picassiano contra la destrucción de la vida.
Profundizando en el simbolismo del cuadro de Pîcasso, varios autores, entre ellos Tankard y Campàs, han realizado estudios de comparación entre el Guernica y el cuadro de Rubens "Alegoría sobre la guerra", sobre el que Picasso se inspiró, lo que permite estudiar la composición desde un nivel mucho más detallado (véase el apartado de enlaces recomendados). En el cuadro de Rubens la mitología griega es fácilmente reconocible: Europa clama ante el despojo de sus bienes, Ares-Marte ha abierto la puerta de la guerra a pesar de los esfuerzos de Afrodita-Venus para contenerlo; las furias llevaran a Ares hacia la destrucción, los monstruos de la peste y el hambre acaban con la prosperidad del comercio (Mercurio) y la cultura. Picasso reelabora y adapta al siglo XX la antigua mitología con más fuerza que nunca (Luna/Nodo Sagitario en la casa V) comunicando todo el horror y destrucción de Guernica como base para construir una nueva cultura sobre la paz.
Cuenta la leyenda que en 1940, con Paris ocupada por los nazis, un oficial alemán, ante la foto de una reproducción del Guernica, le preguntó a Picasso que si era él el que había hecho eso. El pintor respondió: "No, han sido ustedes". El mural (de dimensiones 349,3 por 776,6 centímetros, y 300 kilos de peso) ha sido contemplado hasta ahora por más de 11 millones de personas. En la foto Picasso y Dora Maar.
Tal y como hemos comentado al principio, este año (2007) se celebran los 70 años desde su creación, la UOC organiza un campus para la Paz y la Solidaridad. A través de obras de arte como el Guernica, fotografías, poesías, audiovisuales, novelas o cuentos, música, esculturas.. etc. se irá construyendo un fondo cultural que constituya un recurso al alcance de todo el mundo para la difusión de los valores asociados a la cultura de paz
Imágenes y Video Guernica Picasso en 3D
http://guernica.lena-gieseke.com/
Bibliografia:
Palau i Fabre, J. (1981), El Guernica de Picasso . Barcelona: Blume
Enlaces recomendados:
http://www.museovirtual.org/picasso.htm
http://blog.innerpendejo.net/2006/10/el-guernica-pablo-ruiz-picasso-la.html
http://www.avizora.com/publicaciones/pintura_y_escultura/textos/0021_guernica_picasso.htm
Campus por la Paz y la Solidaridad
http://servicios.elcorreodigital.com/especiales/gernika/cuadro-guernica-picasso
http://cv.uoc.edu/~04_999_01_u07/Guernica/rubenspicasso.htm
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